
Tiene toda la razón Lù, tercera parte del estudio italiano Malleus, cuando afirma que “el cartel despierta nuestra necesidad innata de tocar y poseer, de darle forma a nuestras experiencias y pasiones”. El ser humano tiene adoración por el fetiche, ese objeto físico con el que atrapamos el tiempo y sobre el que proyectamos unas vivencias que, magnificadas con el devenir de los años, nos servirán de argumento cuando queramos corroborar ese tópico según el cual cualquier tiempo pasado fue mejor. En cuanto a la música se refiere, mucho se ha perdido desde los días que plasmaron en sus carteles los pioneros que ha retratado el compañero Beteta; poco queda de una época en la que cada vez que alguien se enfrentaba al agujero negro del vinilo se desplegaba ante él un ritual en el que confluían todos los sentidos: la vista, que se dejaba atrapar por el subyugante poder de las imágenes que proyectaba la portada; el tacto, con el manejo quirúrgico del vinilo desde que se extraía de la funda hasta que en él se clavaba la aguja; el olfato, ese aroma que desprendía un formato ahora recuperado por nostálgicos posmodernos y una industria que vende como nuevo algo que antes desechó por anticuado; y el oído, sentido último y privilegiado de la experiencia musical (el gusto estaría reservado a los fetichistas extremos).
Como en toda debacle, junto a los damnificados por la digitalización del negocio musical en los últimos años han cobrado protagonismo personajes antaño secundarios que hallan nuevas oportunidades en este contexto de caos y confusión. Así como los promotores de conciertos están viviendo una abundancia como no se recuerda gracias a la necesidad del fetichista de arrancar de su artista favorito una experiencia única e irrepetible, la industria del merchandising ha ido ganando terreno en las tiendas de discos que aún no han fenecido, así como en las secciones de música de las grandes superficies. Muñecos, calendarios, camisetas, guantes, pintalabios, zapatillas, piruletas, consoladores… La lista de objetos en los que un artista puede estampar su jeto hoy en día es interminable. Pero pocos conjugan de forma tan especial lo irrepetible de la experiencia en vivo con el fetichismo del objeto físico como los pósters de conciertos. Aunque las grandes discográficas ningunearan durante años la cartelería rock como residual y funcional plasmación de la hoja de ruta del grupo en cuestión, como bien nos recordó la sacrosanta trilogía The Art Of Modern Rock: The Poster Explosion firmada por el especialista Paul Grushkin (autor del pionero The Art of Rock), centenares de artistas han mantenido vivo el legado de Stanley Mouse o Gary Grimshaw en estas últimas décadas, creando imágenes imborrables desde las trincheras de su mesa de trabajo y accesibles para el aficionado a través de esa Web de referencia que es Gigposters.
Actualizando la nómina de diseñadores contenida en esa trilogía, John Foster ha tomado el testigo de Grushkin en New Masters of Poster Design (2006) y el recientemente publicado 1.000 Indie Posters (Rockport), volúmenes imprescindibles para tomarle el pulso a las múltiples posibilidades que la cartelería rock ofrece actualmente. Vivimos un presente abundante en trabajos dignos de admiración y hemos querido contactar con una pequeña representación del boom actual para que nos hablara de cómo se mueve en este momento de auge que disfrutamos.
1) ¿Siempre quisiste diseñar pósteres como parte de tu trabajo o fue una revelación tardía?
2) ¿Cómo suele ser tu proceso de trabajo?
3) ¿Cómo describirías la relación con las bandas, sellos o promotores para los que trabajas?
4) Ahora que la experiencia en vivo parece ser la única parte del proceso musical que no puede descargase, ¿has notado un aumento del interés en tu trabajo por parte de la industria y del público?

BONGOÛT (Berlín, Alemania)
Christian Gfeller & Anna Hellsgârd
www.bongoût.com
Han trabajado para: Lightning Bolt, Wolf Eyes, Melvins, Sonic Youth, Melt Banana, Black Dice, Slayer, Beck o Liars.
Influidos por: “los cartelistas polacos de los años 70, gente como Roman Cieslewicz o Henryk Tomaszewski. También la joven generación de artistas contemporáneos como Thomas Zipp, Dan Colen, Urs Fisher, Manuel Ocampo, Andreas Hofer o Christopher Wool”.
Admiran el trabajo de: Seripop, Sonnenzimmer, Zach Hobbs, Dan Gzeca, Keith Herzig, Blex Bolex, David Sandlin, Atak, Helge Reumann, Xavier Robel.
1) Empecé a diseñar carteles en 1996. Tenía un pequeño taller de serigrafía en un almacén alternativo que albergaba un estudio de grabación y locales de ensayo y en el que se organizaban raves y conciertos. Unos amigos montaron un sello con bandas de garaje-punk y noise y me encargaron el diseño y la impresión de las portadas de los discos así como de los flyers para anunciar los conciertos. Cuando conocí a Anna en 2001 nos trasladamos a Burdeos, que en ese momento cobijaba una escena musical enorme. Fue el sitio perfecto para que pudiéramos potencial el diseño de pósteres como parte integral de nuestro trabajo.
2) Con nosotros suele pasar que uno empieza a trabajar en un proyecto y después de un par de horas el otro le toma el relevo. Pueden existir tensiones, pero ambos somos conscientes de que el otro es también es capaz de enfrentarse de forma objetiva al encargo, detectar los puntos fuertes de los primeros bocetos, excitarse con esas primeras ideas y llevarlas hacia adelante de forma resolutiva. Ese modus operandi nos permite no quedarnos atascados y que el trabajo avance en direcciones que uno no imaginaba. Es un proceso intuitivo que nos obliga a crear un ambiente de armonía creativa, de confianza mutua. Pero la verdad es que nos complementamos muy bien; realizamos distintos esbozos, añadimos Lettraset, tipografías hechas a mano, estampaciones y demás para dar con un primer diseño que escaneamos para digitalmente darle la forma deseada. Anna es la encargada de los borradores y del color, yo de la composición y el trabajo tipográfico. Es como una cadena de montaje, una forma más rápida y eficiente de trabajar, especialmente útil si tienes que cumplir con una fecha de entrega.
3) Es una relación que se basa en el respeto mutuo.
4) En los últimos años hemos experimentado un resurgimiento en el interés por las cosas hechas a mano, que no pueden duplicarse o digitalizarse, algo similar a la experiencia de la música en directo. Los conciertos son algo único y muy valioso en comparación con la simple escucha de mp3, y de igual manera, los pósteres se han convertido en objeto de culto, algo coleccionable. Pero esa fascinación sólo puede aplicarse a un perfil de aficionado muy específico, el público masivo sigue ajeno a ella y ha caído rendido ante el consumo musical (y de todo lo relacionado con él) fácilmente digerible.

DELICIOUS DESIGN LEAGUE (Chicago, IL; EEUU)
Billy Baumann & Jason Teegarden-Downs
www.deliciousdesignleague.com
Ha diseñado para: Fleet Foxes, Pelican, Vampire Weekend, Gogol Bordello, Animal Collective, Vashti Bunyan, Devendra Banhart o The National.
Influido por: Koloman Moser, Jack Kirby, Alain Gree, Eero Saarinen, Bob Peak, Herb Lubalin, Alex Toth, Waldemar Swierzy, Bill Sienkiewicz, Keiichi Tanaami o Ed Emberley.
Admira a: Sonnenzimmer, “por algo se les conoce como los favoritos de los diseñadores de pósteres”.
1) Billy: Empecé a posters serigrafiados en 2003 mientras trabajaba en una agencia de publicidad, pero anteriormente me había pasado años haciendo flyers fotocopiados para los conciertos de las bandas de mis colegas. Así que podríamos decir que la pasión que arrancó en 1996 no se convirtió en mi trabajo a tiempo completo hasta 2008.
2) Ya se trate de un póster, de un logo o de la portada de un disco el proceso creativo arranca con un trabajo de investigación sobre el artista y su audiencia, a partir del cual realizamos los primeros bocetos. Cosas como el título del disco que presentan, las letras de las canciones, así como el estilo que practican sirven para guiarnos en la dirección correcta; si se trata de un grupo sombrío con un sonido lúgubre, el póster debe reflejar inevitablemente eso. En cuanto a las técnicas y materiales no nos cerramos a nada y eso nos ayuda a crear el diseño que mejor encaja con el grupo y no tratar que el grupo sea el que se amolde a un estilo cerrado nuestro.
3) Normalmente existe un equilibrio entre lo que te pagan y el control creativo con el que trabajas; a más pasta, menos control sobre el producto final y viceversa. Muy de vez en cuando consigues uno de esos maravillosos encargos en los que obtienes control creativo y encima te pagan bien; pero eso es cada vez más raro.
4) Actualmente las bandas son conscientes de que en un mundo donde cada vez es más difícil vender discos, la venta de ediciones limitadas de cartelería es una opción maravillosa de hacer dinero mientras están de gira. Es algo parecido a las camisetas, pero con la notable diferencia que puedes personalizar una tirada corta de pósteres para cada concierto, con lo que se convierte un objeto mucho más apreciado por tus seguidores.

EL JEFE DESIGN (Derwood, MA; EEUU)
Jeffrey Everett
www.eljefedesign.com
Ha trabajado para: The Gaslight Anthem, Raveonettes, They Might Be Giants, Wilco, Detroit Cobras, Devo o The Ponys.
Influido por: “Edward Gorey, los cómics de la Marvel, ilustradores de pin-ups como James Jean o Joseph Linsner, gente que mi inspira como Mick Foley, Henry Rollins, Bob Mould o Todd Ashley. Y mi mujer y mis dos hijos”.
Admira el trabajo de: Chuck Sperry, Methane, Hero y Strawberry.
1) Siempre me gustaron los flyers y la cartelería pero ese no era mi foco de atención cuando empecé a estudiar; ¡por aquel entonces creía que el diseño de CDs era la cima! Pero cuando estaba terminando la carrera empecé a buscar trabajo como diseñador de pósteres de grupos en gira. Por aquel entonces, diseñadores como Art Chantry, James Victore y Stefan Sagmeister eran los maestros en ese terreno y me pareció que era la perfecta combinación de mis dos grandes pasiones. Hice un curso de impresión y cuando una banda que me gustaba visitó mi ciudad me animé a hacerles el póster del concierto. Fue un buen inicio… Y entrar gratis en el concierto fue un extra inesperado pero suculento.
2) El principio básico de todo encargo es que me guste el grupo, sino seré incapaz de esforzarme al máximo. Si pasa ese primer filtro, escucho su música a todas horas. Me sumerjo en sus canciones para comprender qué quieren expresar con ellas; busco pequeños detalles que quizá no aprecie en una primera escucha, buceo en sus influencias y libero mi mente para dejar que las letras desplieguen toda su imaginería en mi mente. En ocasiones, como con The Gaslight Anthem, sus canciones me sugieren una docena de esbozos preliminares que enseño al grupo para que me indiquen si voy por buen camino. Tengo guardados esos esbozos, ¡pero nunca verán la luz! Otras veces, recibo un flashazo que me ilumina con una idea brillante e inesperada. Hace poco hice un póster para The Bouncing Souls, a los que admiro desde hace años. Tenía miedo de no estar a la altura y eso me tenía atascado; pero entonces un día, escuchando su último disco por enésima vez, una frase desplegó todo un universo en mi cabeza y supe por donde avanzar con el diseño. Y lo mejor es que se me ocurrió una idea que nunca hubiese asociado con ellos.
3) Me gusta que todos los implicados acabemos satisfechos con el resultado final. Con todo, prefiero dejar por escrito en el contrato los términos del encargo y así luego no aparecen abogados metiendo sus narices. Me gusta mostrarme accesible y crear buen rollo (¡me están pagando por dibujar tías medio desnudas!), pero eso no es óbice para que no quiera protegerme también. Una vez todo está claro, empiezo por escuchar las sugerencias del grupo; qué tipo de imágenes creen que encajan en su mundo y cuáles no (a veces más importante), información sobre el disco que presentan, etc.… Tanto ellos como yo somos artistas y la verdad es que la mayoría entiende que al fin y al cabo yo soy fan y sólo aspiro a crear algo que perdure en el tiempo.
4) Creo que hoy en día las bandas lo tienen difícil para rentabilizar económicamente su música. Los CD se filtran en Internet meses antes de que salgan a la venta y eso es muy perjudicial tanto para los grupos como para sus sellos, especialmente los pequeños. El merchandising coleccionable es una opción atractiva si inviertes en un buen diseñador. Hice un póster para The Gaslight Anthem coincidiendo con la salida de su último disco y las copias previstas se agotaron en diez minutos.

MALLEUS (Tortona, Italia)
Lù, Urlo & Poia
www.malleusdelic.com
Han trabajado para: Acid Mothers Temple, Queens Of The Stone Age, High On Fire, Neurosis, Nine Inch Nails, Sonic Youth o Flaming Lips.
Influidos por: Hiroaki Samura, Sergio Toppi, David D’Andrea, Andrea Pazienza, Mignola, Kenneth Anger, Man Ray, Kawasaki, Kozik, Banksy, Dalí, Moebius o Ashley Wood.
Admiran el trabajo de: “los mismos que nos han influido”.
1) Lù: Empezamos haciendo portadas de discos y poco a poco nos fuimos metiendo en el mundo del diseño de carteles. El desafío inicial fue descubrir cómo trabajar las serigrafías, era un mundo desconocido para nosotros; pero como estaba escrito en alguna parte que íbamos a ser diseñadores de pósteres, un día conocimos por casualidad a los que serían nuestros maestros. Egi y Rosanna nos enseñaron a serigrafiar y actualmente ese es nuestro trabajo principal.
2) Lo más importante que se produzca un chispazo con la música para que se cree el ambiente adecuado con el que visualizar la imagen que perseguimos. Y para trabajarla usamos distintos instrumentos: el cerebro y las manos; lápices, tinta, colores, papeles, ordenadores, limpiacristales (risas). Realizamos bocetos para ver cómo debemos encajar el concepto con las letras y los colores; dibujamos el diseño final y entintamos a mano. Lo escaneamos, le damos color e imprimimos a mano.
3) Además de con su música debe producirse una misma química con el grupo, con las personas para las que vamos a trabajar. Creemos en el respeto mutuo, es la base para que cualquier relación, personal y laboral, llegue a buen puerto.
4) Es cierto que de un tiempo a esta parte hemos visto un incremento en el interés hacia los pósteres de conciertos, pero no creo que eso se deba exclusivamente al devenir del negocio musical. Tienes razón en cuanto a lo de la físico de un cartel, al hecho de que despierta nuestra necesidad innata de tocar y poseer, de darle forma a nuestras experiencias y pasiones. No podemos depender únicamente de las descargas digitales porque no nos parecen naturales, sentimos que en ellas hay una pérdida de magia, de vida.

METHANE STUDIOS (Atlanta, GE; EEUU)
Mark McDevitt & Robert Lee (responde Mark)
www.methanestudios.com
Han trabajado para: Dave Mathews, Sufjan Stevens, Phish, The Black Keys, The Dead Weather, Iron & Wine o Bright Eyes.
Influidos por: Lucian Bernhard, Ludwig Hohlwein, Herbert Bayer, Jan Tschold o Ben Shahn.
Admiran el trabajo de: Todd Slater, Ken Taylor, The Small Stakes, Rob Jones, Patent Pending, Guy Burwell, Dan Stiles, Dan McCarthy o Dan Grzeca.
1) Mark: Cuando terminé la universidad empecé a trabajar como ilustrador freelance, pero el mercado editorial cambió y lo de diseñar carteles se convirtió en una válvula de escape al salir del trabajo. Curraba como diseñador de camisetas y me sentía algo frustrado, hasta que un día decidí recuperar lo aprendido sobre impresión en la universidad y unirlo a mi pasión por el diseño. Quería disfrutar del proceso de ver como una imagen formada en mi cabeza crecía ante mis ojos.
2) Lo más importante siempre es el concepto; primero hay un intenso trabajo de investigación, luego nos sentamos y hacemos muchos bocetos para ir desarrollando ese concepto. Siempre estamos experimentando nuevos estilos, nuevas técnicas según la dirección hacia la que nos lleve esa idea que cataliza inicialmente el póster.
3) Tenemos relaciones distintas con cada banda, las hay con las que sabemos que debemos ser más conservadores que con otras. Las bandas de mayor renombre suelen presentarte más estipulaciones a nivel creativo, pero ellos conocen bien a su público y nosotros debemos trabajar para ajustarnos a sus requisitos porque lo importante es que el póster que diseñas debe conectar con sus fans.
4) Creo que a la gente le gustan los carteles ya que el packaging se ha ido reduciendo desde la década de 1970. Recuerdo que cuando era pequeño el diseño de las fundas de los vinilos me impactaba enormemente; te metían en el mundo visual de cada grupo y eso te empujaba a comprar más discos, camisetas y demás. Cuando aparecieron los cassettes primero y a continuación los CD, el diseño se empequeñeció. Con el tiempo las bandas se han ido dando cuenta de que los pósteres, tanto como las camisetas, son un elemento de merchandising valioso y se cuidan bien de encargarlo a diseñadores en los que confían. Además, los pósteres se revalorizan con el tiempo y hay seguidores que pagan fortunas por ellos.

PATENT PENDING (Seattle, WA; EEUU)
Jeff Kleinsmith & Jesse Ledoux
www.patentpendingindustries.com
Han trabajado para: The Shins, She & Him, Melvins, Low, Spoon, Turbonegro, Guided By Voices, Sleater Kinney o Franz Ferdinand.
Influidos por: Ben Shahn, Saul Bass y Art Chantry.
Admiran el trabajo de: Aesthetic Apparatus, Little Friends of Printmaking, Sonnenzimmer, Seripop, Heads of State, Ames y Mike King.
1) J.K: Una revelación tardía, sin duda. Fue Jeff quien me metió en ese mundo cuando empecé a trabajar en Sub Pop. Siempre le veía sumergido en el diseño de nuevos carteles para los grupos del sello y me parecía algo fascinante y divertido. ¡Y vaya si lo es!
J.L.: En mi caso siempre formó parte de mi trabajo como diseñador. Un profesor de la universidad vio el amor que tenía por el diseño y la música y me animó a unir ambas pasiones y convertir eso en mi carrera profesional.
2) J.L.: Escucho mucho la música del artista antes de empezar a trabajar en su poster. A partir de ahí, simplemente trato de crear una imagen que a mi entender conecte visualmente con lo que me inspiran las canciones.
3) J.K.: En una primera fase, animamos al grupo / sello / promotor a que se implique y nos comunique qué ideas tiene, qué pretende comunicar o que nosotros plasmemos en su poster. Pero una vez entendemos lo que quieren y el encargo está claro, nos gusta que nos den libertad para coger sus ideas y plasmarlas de la forma que nosotros consideramos que mejor conecta con ellas.
J.L.: Sin duda es importante que cada pieza del proceso creativo conozca su sitio y sus habilidades. Al final, muchas voces opinando pueden ser perjudiciales para el resultado final, para el poster que tanto ellos como nosotros anhelamos hacer.
4) J.K: Aunque antiguamente los posters se usaban como mero soporte promocional, lo cierto es que ahora son considerados como un producto del merchandising más. Ahora los grupos están más dispuestos a pagar más por el diseño de un póster, pues saben que podrán sacarle más rentabilidad. Con todo, esta revalorización ha traído una avalancha de nuevos diseñadores a este terreno, algunos de los cuales infravaloran su trabajo como una mera manera de ampliar sus fuentes de ingreso. Y eso ha acabado por devaluar el producto y que los precios estén bajando.
MADE IN SPAIN: POR AMOR AL ARTE
“Hace unos años nadie quería gastarse un pavo en pagar a un artista, y menos teniendo a un vecino que dominaba tipografías como Arial y Comic Sans y sabía de Photoshop. Cuando la cosa parecía salir un poco del desastre y empezábamos a disfrutar de un cierto respeto, caemos de lleno en una crisis y tanto los promotores como muchas bandas han vuelto a la edad de piedra”. El valenciano Leviathan (leviathan13.com), habitual de las páginas ruteras y reconocido más allá de nuestras fronteras, lleva suficientes años buscándose la vida en el páramo del rock nacional como para saber de lo que habla. En esa misma línea, Javier Ezquerro (myspace.com/silvertrackproducciones), recuperador del diseño clásico de la Costa Oeste en carteles para bolos de Ian Hunter, Marc Ford, Dick Dale o Redd Kross, afirma que “hay mucho intrusismo, muchas promotoras ya no pagan para que les hagan un cartel, sino que optan por el yo me lo guiso y yo me lo como, pongo el nombre del grupo, punto de ventas de entradas y listo”. Con todo, pese a la precariedad que se ha vivido aquí desde siempre (¡que se lo digan al bueno de Cochambre, todo un referente!), es evidente que el interés fetichista por los pósteres que se vive en el extranjero también empieza a penetrar entre el aficionado rockero patrio. Significativo es el reciente alumbramiento de la web thepostercollective.org, punto de encuentro y de exposición para la más reciente hornada de diseñadores creado por el también cartelista Xavier Forné (error-design.com), colaborador habitual de uno de los sellos nacionales más cuidadosos con el diseño gráfico, BCore. “Tengo en mente montar exposiciones por todo el país, así como conciertos y publicar un libro que recoja todo este movimiento. Creo que aquí hay un potencial enorme, que tenemos un montón de buenos diseñadores e ilustradores, muchos de ellos aficionados o sin formación, haciendo trabajos de nivel”.
Un rastreo por su web, en la que ya han colgado sus trabajos gente como Walrus & Eggman, The Beard, Un Buen Tipo, Münster o Abel Cuevas, certifica que algo se mueve y que una nueva generación aspira a obtener su merecido reconocimiento. “Para bien o para mal”, apunta Cuevas, “no vivo de esto, lo que me permite ser muy selectivo con los encargos que acepto. Hacer un poster para algunos de mis grupos favoritos, como MV&EE, Tom Carter, Six Organs of Admittance, Wooden Shjips o Pocahaunted me da mucha alegría”. Y es que la pasión por la música es un factor determinante para entender por qué alguien que quiere ganarse la vida como diseñador / ilustrador acaba liándose la manta a la cabeza y se lo curra para crear un trabajo que le dará pocos dividendos pero sí muchas ilusiones. En este sentido, la buena sintonía con los grupos, el saber que todos los implicados están metidos en este negociado en gran medida más por vocación pasional que comercial, ayuda a que se cree una complicidad músico – diseñador. “Al igual que sucede en cualquier trabajo, cuando hay intereses y gustos comunes y una buena comunicación, todo se hace más agradable”, afirma Rubén Suárez, miembro de un estudio, Bunker Graphics (bunkergraphics.com), muy vinculado a la promotora Bloodymary, para la que ha realizado carteles de conciertos de The Hi-Risers, Barrence Whitfield, Roy Loney o Sour Jazz. Otro valor en alza es el valenciano Mik Baró (mikbaro.com), responsable de toda la gráfica que rodea el último lanzamiento de Los Chicos, quien reincide en la camaradería existente: “Tengo un vínculo especial con Wau (y los Arrrghs!), por mantener una relación personal al residir en la misma ciudad y frecuentar mismos garitos y compañías”.

MIK BARÓ
www.mikbaro.com
¿Cómo y por qué te convertiste en un diseñador gráfico / ilustrador?
Pues yo fui por mixtas y en aquellos años llegué a tener bastante claro que iba a comer de algo de ciencias dejando el tema plástico arrinconado como hobby de por vida. A partir de selectividad algo se torció… debí oir un click! o cuestión de que me tiró más pasarme el día haciendo garabatos que metido en los libros
¿Siempre quisiste diseñar carteles concierto como parte de tu trabajo o fue una revelación tardía?
En un principio los carteles eran simplemente para fiestas, fiestas de alcohol con cobro en especies… Supongo que con dieciocho-diecinueve abandonar el pueblo y asistir a un concierto de las Besttias en la capital leonesa es darme de bruces con el punkrock y lo que realmente me gustaba.
¿Cuáles son tus influencias artísticas?
De lo más variado, creo que las influencias pueden salirse del terreno del RnR, pueden venir de la pintura, de la animación, del día a día… aunque después los referentes sean más obviamente rockeros… está todo inventado
¿Cómo decides qué encargos aceptas?
Pues sopesando lo de siempre: plazos, presupuesto… la naturaleza del encargo y de donde viene, sobre todo las concesiones vienen de esto último y la consecuencia acaba siendo meterte en fregaos que no se producirían en otro tipo de encargo (que no sea proveniente del RnR)
¿Cómo describirías la relación, tanto artística como comercial, con las bandas, los sellos o los promotores con que trabajas?
Pues no en todos los casos se establece el mismo tipo de relación… en ocasiones parte del colegueo, en otras la transacción comercial acaba derivando en una relación de amistad y trabajo y otras veces queda limitada al encargo que si por ambas partes se cumple con profesionalidad suele tener continuidad en futuras colaboraciones
Ahora que la experiencia en vivo parece ser la única parte del proceso musical que no puede descargarse, ¿has experimentado un aumento del presupuesto o interés en el diseño de carteles de conciertos por parte de los promotores y/o las bandas?
El interés por el diseño y la imagen es el que hay… vamos, que creo que no depende de crisis (aunque algo se note, claro) o cambios de modelo de mercado, depende de quien lo aprecia y quién no. Lo del aumento de presupuesto… no sé yo, lo que si he apreciado con el avance de la década es una mayor fabricación de vinilo y que si cuidas tu reputación profesional puedes ir fijando unas tarifas.
7) ¿Hay alguna banda específica con la que hayas creado un vínculo especial o una conexión creativa relevante?
En el último año con Los Chicos, curtidos músicos y grandes personas… espero que dure muchos años! Con los Wau (y los Arrrghs!) a partir del disco de éstos con Munster, pero sobre todo por mantener una relación personal al residir en la misma ciudad y frecuentar mismos garitos y compañías. Obviamente con gente de mi ciudad natal, Juancho (Bummer) de Lizard Music que fue el empujón en mis inicios, gran amigo y profesional. Alicia Elektra que tanto ha hecho y sigue haciendo desinteresadamente por el rock en León, nunca podremos agradecérselo suficientemente… y podría seguir… no sé, estas cosas son una mierda porque acabas dejándote a un montón de peña.
¿Cuál es tu proceso creativo?, ¿cómo trabajas la idea que quieres expresar y cuáles son los elementos o las herramientas de diseño con las que trabajas?
Pues en principio hay que establecer un pequeño “briefing” entre lo que quiere el cliente y lo que tú propones… e ir encontrando el camino del medio. Si hay material de referencia, si ayer emborrone una servilleta que ahora mismo escaneo… a partir de ahí pues voy enviando, el cliente me responde con las impresiones al respecto y el proceso continua y va tomado forma… en ocasiones se alarga más y en otras se solventa rápido. Yo empecé a mediados de los 90 y pensándolo hoy día… sin la red no hubiese hecho ni una tercera parte. Al final cuando lo tienes casi listo te das cuenta que no te han enviado tal info, fechas, el numero de referencia de no sé qué… jejej… que si esto supone modificaciones estructurales en el arte final… entonces no te da tanta risa
¿Qué otros diseñadores de posters / ilustradores admiras?
Los clásicos, Rick Griffin, Wes Wilson, Victor Moscoso y toda la explosión ácida Costa Oeste en los 60. Crumb, B.Wolverton, Ed Roth, Robert Williams….
Más de ahora: Merinuk , Rockin Jelly Bean (esas chavalas no pertenecen a ningún universo conocido!), Mictch Oconell… lo mismo que antes, me pillas otro día y fijo que me dejaría alguno de estos y me saldría algún otro… En cuestión de procesos de impresión y virguerías compositivas Black Yard o Michel Casarramona. Colegas, bajo el riesgo de que me voy a dejar en el tintero: Fuzzhound Lluis, Mr Bratto, Luis Demano, Jose 3501, Palami…
Y, por último, ¿con qué bandas actuales te gustaría trabajar y qué artistas clásicos te hubiera gustado trabajar y por qué?
Pues con lo que venga, sinceramente. No tanto por la banda en si (no soy mitómano en ese aspecto) si no por el interés e implicación de la otra parte. A veces con bandas pequeñas y semidesconocidas la experiencia ha sido más divertida y satisfactorias que con artistas consagrados. Estuvo muy chulo el 7” para Soul Movers, duo actual de Deniz Tek con su señora, no son los Birdman… pero lo sentí como un proyecto actualmente más suyo. Lo de las bandas clásicas mola… pero a veces reuniones con la 4ª formación es simplemente diseñar para un nombre con la única intención detrás de recaudar para la jubilación.
Ha sido un placer la oportunidad que Munster me brindó de diseñar para los Saicos, una edición de las que da gusto ver acabadas. Con el añadido del “fenómeno de la pelusilla” y demás aberraciones!!! jajajaja

BUNKER GRAPHICS
www.bunkergraphics.com
¿Cómo y por qué te convertiste en un diseñador gráfico / ilustrador?
Supongo que el tener inquietudes creativas y una especial fijación por la música fueron los principales motivadores. Empecé a tocar la guitarra en grupos a los dieciocho años, y a partir de ahí me metí de lleno en un sinfín de actividades relacionadas (pinchadiscos, trabajos en discográficas, tiendas de discos, promotoras de conciertos…). Cuando abandoné mis estudios universitarios realizaba varias de esas tareas a la vez, pero llegó un momento en que pensé que el convertirme en diseñador gráfico no era una mala opción. Me formé en las nuevas teconologías del momento y tras unos meses haciendo algunos trabajos como freelance formé junto a mis socios y también diseñadores Roberto Argüelles y Paulo Pascual el estudio de diseño Bunker Graphics. Pensamos que era una buena opción para ganarse la vida haciendo lo que nos gusta, y bueno, aunque hay que trabajar duro, despúes de casi nueve años seguimos pensándolo.
¿Siempre quisiste diseñar carteles concierto como parte de tu trabajo o fue una revelación tardía?
La verdad es que hace quince o veinte años nunca lo hubiese imaginado. Antes hacía carteles con recortes y fotocopias para las bandas en las que estaba, así como portadas para discos imaginarios. Desde pequeño siempre he dado tumbos pensando en qué sería de mayor.
¿Cuáles son tus influencias artísticas?
Todo lo que pasa por delante de mis ojos y me gusta, desde una etiqueta de cerveza belga a un Corvette del 66. Entre los artistas destacaría a Rick Griffin, Hanna-Barbera, Hipgnosis, Jim Flora, Warhol…
¿Cómo decides qué encargos aceptas?
Tal como están las cosas, aceptamos cualquier trabajo siempre que el precio y el plazo sean razonables.
¿Cómo describirías la relación, tanto artística como comercial, con las bandas, los sellos o los promotores con que trabajas?
En general hay una relación muy buena, incluso en muchos casos de amistad, bien previa a la relación comercial o que surge a raíz de la misma. Al igual que sucede en cualquier trabajo, cuando hay intereses y gustos comunes y una buena comunicación, todo se hace más agradable. Es preferible trabajar con una sola persona que decida sobre el trabajo, bien sea promotor, productor o artista. En los casos de grupos que toman todas las decisiones democráticamente es más complicado llegar a algo que satisfaga a todos y generalmente el resultado es peor, al estar condicionado por diferentes criterios.
Ahora que la experiencia en vivo parece ser la única parte del proceso musical que no puede descargase, ¿has experimentado un aumento del presupuesto o interés en el diseño de carteles de conciertos por parte de los promotores y/o las bandas?
Más bien todo lo contrario, se nota que son tiempos de vacas flacas y que se está intentado reducir costes. La organización de un evento es una cadena y si la gente tampoco acude a los conciertos, cubrir los gastos de producción, caché, etc, es complicado.
¿Hay alguna banda específica con la que hayas creado un vínculo especial o una conexión creativa relevante?
Tengo especial predilección por The Hi-Risers. Nos hemos hecho amigos y además son una gran banda, de las mejores que se pueden ver y escuchar actualmente. La primera vez que los ví, Greg me regaló uno de sus cds sin conocerme de nada sólo por nombrar a NRBQ. ¡Qué gran tipo! Aunque no han encargado ellos los diseños, les he realizado dos carteles de giras (una con Barrence Whitfield y otra con Roy Loney) y la portada del 10″ split con Los Coronas que ha sacado Bloody Hotsak.
¿Cuál es tu proceso creativo?, ¿cómo trabajas la idea que quieres expresar y cuáles son los elementos o las herramientas de diseño con las que trabajas?
Primero se tiene en cuenta el perfil del cliente, lo que se quiere anunciar y a quién va dirigido. Luego se piensa una idea que encaje, que es donde hay que echarle imaginación para que el mensaje sea claro y tenga impacto visual. Casi siempre trabajo directamente en el ordenador, diseñando con programas de dibujo vectorial y de tratamiento de imágenes. Puntualmente utilizo dibujos realizados a mano, que luego me llevo al ordenador, así como fotografías y texturas.
¿Qué otros diseñadores de posters / ilustradores admiras?
Actualmente hay un verdadero aluvión de personas que realizan trabajos de una calidad artística enorme, entre mis favoritos Art Chantry, Derek Yaniger, Shag, Vince Ray, Mik Baro, Jorge Alderete, Ragnar, … Si a estos les sumamos los clásicos la lista se hace interminable.
Y, por último, ¿con qué bandas actuales te gustaría trabajar y qué artistas clásicos te hubiera gustado trabajar y por qué?
En este momento mis bandas y artistas favoritos son The Sadies, Fleshtones, Chesterfield Kings, Hi-Risers, Los Chicos… porque tienen las mejores canciones, los mejores directos y las mejores actitudes. De los artistas clásicos, hay tantos que admiro que me sentiría orgulloso con sólo haber realizado algún cartel o portada para cualquiera de ellos. Puestos a soñar, haber currado con los mejores, que son Little Richard, Chuck Berry, Rolling Stones, Beatles, Dylan, Neil Young, Who, Small Faces… y Roky Erickson, aunque me imagino que lidiar con las personalidades de estos genios no hubiese sido tarea fácil, ja, ja.

ABEL CUEVAS
www.abelcuevas.com
¿Cómo y por qué te convertiste en un diseñador gráfico / ilustrador?
Un poco por casualidad. Mientras estudiaba una carrera que no tenía mucho que ver con el diseño gráfico, hice con unos amigos un fanzine, Recuerdos desde Sebastopol (sería el año 2000 o 2001), y me encargué en gran parte de la maquetación. Me gustó mucho la experiencia. Tanto que pase el último año de facultad mirando todos los libros de diseño en la biblioteca, y al acabar me metí a estudiar diseño gráfico y maquetación. Y, aunque suene un poco tópico, siempre me ha gustado grabar recopilaciones, y hacer portadas para ellas era la parte más divertida y satisfactoria. Profesionalmente llevo unos años dedicado a la maquetación en prensa y, gracias a la realización de carteles, de un tiempo para acá he recuperado el gusto por la ilustración.
¿Siempre quisiste diseñar carteles concierto como parte de tu trabajo o fue una revelación tardía?
Definitivamente, una revelación tardía. Hasta hace unos años lo mio era maquetar casi exclusivamente, y cuando tenía que hacer algún poster, para otro fanzine en el que estuve metido (Dead City Radio) o algún concierto que monté, no me sentía especialmente cómodo. Entonces no dibujaba, lo que hacía eran fotomontajes basicamente. El primer poster con el que me sentí satisfecho fue el primero en el que dibujé casi todo, para un concierto de MV & EE with the Golden Road de hará 3 años. A partir de ahí empiezo a hacer carteles de una manera constante.
¿Cuáles son tus influencias artísticas?
Sí, siempre quise hacer carteles. Los posters de conciertos de los ’60s y ’70s siempre me fascinaron, y siempre me ha dado rabia lo funcionales y feos que son los que se ven normalmente en las calles anunciando grandes eventos casi siempre. Con 15 años, Frank Kozik fue el primero en abrirme los ojos y ver que se podían hacer cosas diferentes en cartelería de rock, aunque ahora sea una estética que no comparta mucho. La aparición de estudios y diseñadores americanos como The Small Stakes, Spike Press, Methane Studios, Aesthetic Apparatus, Little Friends of Printmaking o Jay Ryan ha sido una influencia muy grande. De todas formas, mi debilidad son los ilustradores americanos de los ’50s, ’60s y ’70s: Charley Harper, Jim Flora, David Weidman; los comics de Marvel y DC de esa época (Jack Kirby, John Byrne, Neal Adams, Bill Sienkiewicz…). Actuales, me gustan mucho Matthew Lyons, Nate Williams, Tim Biskup o Jon Klassen.
¿Cómo decides qué encargos aceptas?
Para bien o para mal, según se mire, no vivo de esto. Lo cual me permite ser muy selectivo con los encargos que acepto. En general me gusta hacer carteles para grupos que realmente me gustan mucho. Hacer un poster para uno de tus grupos favoritos es una cosa muy satisfactoria. Ver que he hecho posters para MV&EE, Tom Carter, Six Organs of Admittance, Wooden Shjips, Pocahaunted, Arborea o James Blackshaw me da mucha alegría. De todas formas uno es un currito en esto y a cambio de un precio justo he hecho y hago cosas para grupos que no me motivan mucho.
¿Cómo describirías la relación, tanto artística como comercial, con las bandas, los sellos o los promotores con que trabajas?
Hasta ahora siempre he trabajado a un nivel muy underground (no me gusta la dichosa palabra pero sirve para hacerse una idea). Casi todos los grupos que me gustan y con los que trabajo no son muy grandes, las promotoras de conciertos tampoco suelen serlo. Eso implica que nunca me haré rico con esto, pero a cambio me permite tener una libertad artísitica prácticamente total. Y esa en estos momentos es una situación en la que me encuentro muy cómodo.
Ahora que la experiencia en vivo parece ser la única parte del proceso musical que no puede descargase, ¿has experimentado un aumento del presupuesto o interés en el diseño de carteles de conciertos por parte de los promotores y/o las bandas?
En realidad apenas llevo tres años haciendo carteles de manera continuada, así que la realidad en la que me he movido siempre ha sido esta. No tengo referencia de cómo era hacer posters antes de las descargas. Por otra parte, es lo que comentaba en la pregunta anterior, me muevo en ambiente de promotores tan pequeños que los presupuestos son mínimos. De todas formas, sí que me da la sensación de que en los últimos años hay más preocupación por anunciar los conciertos con carteles. Aunque ahora muchas veces la promoción sea únicamente vía web, la exposición de los carteles es mayor. Por muy fetichista del papel, y por mucha alegría que me dé cada vez que veo un poster mío en la calle, el potencial de internet para exponer el trabajo de uno es innegable.
¿Hay alguna banda específica con la que hayas creado un vínculo especial o una conexión creativa relevante?
Trabajo más con promotoras que con artistas directamente. Promotoras como Giradiscos, Primeros Pasitos, Quesopantalones, Sderock, Indienauta, Born! o Green Apple Falls son mis vínculos con los grupos. Son los que me dicen si a tal o cual artista le ha gustado el poster que he hecho. Cuando te dicen que a Tom Carter, a Arborea, a Nick Castro o a Ian Svenonius le ha gustado tu trabajo es una alegría tremenda.
¿Cuál es tu proceso creativo?, ¿cómo trabajas la idea que quieres expresar y cuáles son los elementos o las herramientas de diseño con las que trabajas?
Intento que el poster transmita un poco lo que es la música. A veces es bastante complicado, pero es parte del reto. Al principio me frustraba no hacer posters con un concepto claro detrás, con el tiempo me estoy dando cuenta de que lo mío no son los conceptos, son más viñetas, pequeñas escenas que intenten reflejar a los grupos dentro de lo que es mi estilo. El proceso es básicamente buscar una idea, ver muchas imágenes, hacer bocetos en un cuaderno hasta que algo me gusta, pasarlo a tinta y luego trabajar el color y los retoques en en el ordenador con Photoshop o Illustrator. Mi asignatura pendiente es la serigrafía y me gustaría hacer algo en breve.
¿Qué otros diseñadores de posters / ilustradores admiras?
Algunos de los que ya he nombrado un poco más arriba como The Small Stakes, Spike Press, Methane Studios, Aesthetic Apparatus, Little Friends of Printmaking o Jay Ryan. Y en España me gusta mucho lo que hace 3501.
Y, por último, ¿con qué bandas actuales te gustaría trabajar y qué artistas clásicos te hubiera gustado trabajar y por qué?
De bandas actuales he tenido la suerte de hacer posters para algunos de mis grupos favoritos (MV&EE, Tom Carter, Six Organs of Admittance, James Blackshaw…). Aunque no sigo la actualidad musical demasiado, estaría bien hacer algo para Akron/Family, Wooden Wand, Kiss the Anus of a Black Cat o Silvester Anfang. De artistas clásicos, me hubiese encantado ilustrar alguno de esos carteles dobles con Grateful Dead y Quicksilver Messenger Service.

ERROR DESIGN
www.error-design.com
http://www.thepostercollective.org
¿Cómo describirías la relación, tanto artística como comercial, con las bandas, los sellos o los promotores con que trabajas?
Hay de todo un poco, supongo que las bandas son las que más se implican en el arte de su disco, cartel, etc. Es algo muy suyo y siempre buscan lo mejor. Suelen dar algunas ideas o conceptos con los que trabajar, aunque siempre intento aportar algo de mi para darle un toque más personal. Está claro que siempre gusta más trabajar cuando tienes el camino más abierto y libre para hacer lo que más te salga en ese momento. Hay discográficas que no aprecian lo importante que es el artwork y como les puede beneficiar a ellos. Por suerte, con las que he trabajado o trabajo, eso es un punto fuerte de la edición de un disco o promo de un concierto. Los promotores es un mundo aparte, almenos en mi caso, van más por el rollo comercial que artístico, y lo que les interesa es tener el arte final cuánto antes para poder moverlo. Así que si tengo que elegir un orden me quedo en primer lugar con las discográficas, porque el trato es más profesional y dejan bastante más libertad a la hora de trabajar. Luego las bandas, y para terminar las promotoras.
Ahora que la experiencia en vivo parece ser la única parte del proceso musical que no puede descargase, ¿has experimentado un aumento del presupuesto o interés en el diseño de carteles de conciertos por parte de los promotores y/o las bandas?
Si es verdad que por desgracia, hoy en día, el concierto es lo que vale. En parte está bien, porque suele ir más gente, y el grupo tiene que prepararse a fondo para dar un buen directo. Podría decirse que, cada directo es como la grabación de un disco: tienes que hacerlo perfecto. He experimentado un mayor aumento de trabajo, y de nivel de arte final. Eso se agradece, pues se va notando que se empieza a tomar enserio el tema cartelería de conciertos en España… De presupuesto… que te voy a decir, te encuentras de todo: los que te pagan lo que vale tu trabajo, los que no te pagan, o los que te prometen cenas prestigiosas que nunca llegan (A ver si lo leen y cumplen jajajaja).
¿Qué te empujó a crear el web thepostercollective.org? ¿Crees que vivimos un buen momento cualitativo en nuestro país?
Tengo muy claro que me motivaron dos aspectos muy importantes: Uno, el darme cuenta que en España esta cultura está totalmente infravalorada. Ni discográficas, ni promotoras y ni las bandas se preocupan lo suficiente. Esto hace que no destaque apenas nada, y que no se valore en absoluto este trabajo.
En segundo lugar, y muy importante, el gran potencial que existe en la península es brutal. Diseñadores, ilustradores, etc. Y muchos de ellos aficionados o que poco han estudiado, y eso lo hace aún más bonito.
Lo que quiero conseguir con The Poster Collective, es un punto de unión, de encuentro, de todas aquellas personas que les enamore esta rama del diseño, el diseño de Posters de Conciertos. El proyecto empieza con una web recién estrenada, dónde los artistas publican de forma periódica los carteles. Pero esto es la base, ya que en mente están las fuerzas para montar exposiciones por todo el país, así como conciertos y (lo que más deseo) la publicación de un libro que recoga un poco de cada uno. A ver si así, en España, se empieza a valorar todo este trabajo y de alguna manera, nosotros, nos veamos beneficiados de alguna manera u otra.

JAVIER EZQUERRO
www.myspace.com/silvertrackproducciones
¿Cómo y por qué te convertiste en un diseñador gráfico / ilustrador?
Estudié Artes Gráficas hace ya muchos años, así que lo del diseño y creatividad me vino más bien por inquietud personal, por querer hacer algo un poco más imaginativo y no centrarme exclusivamente en la parte técnica del proceso de la creación de revistas, libros, etc…
¿Siempre quisiste diseñar carteles concierto como parte de tu trabajo o fue una revelación tardía?
Más bien fue algo tardía, a raíz de crear mi propia promotora de conciertos y realizar los posters de los conciertos que íbamos organizando.
¿Cuáles son tus influencias artísticas?
Básicamente la de los años 60 y 70 de todos los conciertos que se llevaban a cabo en aquellos años, sobre todo en el Fillmore West de San Francisco.
¿Cómo decides qué encargos aceptas?
Sinceramente, en los tiempos que corren la cosa no está como para elegir, así que, lo que me proponen, bienvenido es.
¿Cómo describirías la relación, tanto artística como comercial, con las bandas, los sellos o los promotores con que trabajas?
Destacaría más la relación con las bandas porque al final son ellos los más agradecidos en llegar a una ciudad y ver que se ha hecho un poster de su concierto con cara y ojos, comercialmente siempre es más llamativo ver una cartelería colgada en la calle que llame la atención de la gente, sobretodo ahora, con la saturación de conciertos que hay.
Ahora que la experiencia en vivo parece ser la única parte del proceso musical que no puede descargase, ¿has experimentado un aumento del presupuesto o interés en el diseño de carteles de conciertos por parte de los promotores y/o las bandas?
La verdad es que no, de unos años atrás hasta ahora, todo el mundo tiene un ordenador en casa, lo único que he experimentado es mucho intrusismo a la hora de hacer un cartel, es decir, muchas promotoras ya no pagan porque les hagan un cartel, más bien es, yo me lo guiso y yo me lo como, pongo el nombre del grupo, punto de ventas de entradas y listo.
¿Hay alguna banda específica con la que hayas creado un vínculo especial o una conexión creativa relevante?
El vínculo con las bandas lo creo en el momento que ven mi trabajo y se sienten más valorados al ver que hay alguien que se preocupa por su imagen, a partir de ahí siempre puede salir algún proyecto más, como me sucedió con Bravo Johnson o a nivel local con Schizoprenic Spacers.
¿Cuál es tu proceso creativo?, ¿cómo trabajas la idea que quieres expresar y cuáles son los elementos o las herramientas de diseño con las que trabajas?
Primero me fijo en la estética del grupo o algún tipo de elemento específico que los identifique, a partir de ahí ya me pongo en crear algún boceto y darle forma con el ordenador.
¿Qué otros diseñadores de posters / ilustradores admiras?
Como te decía anteriormente artistas de los años 60 y 70, como Wes Wilson, Herb Greene, Rick Griffin…
Y, por último, ¿con qué bandas actuales te gustaría trabajar y qué artistas clásicos te hubiera gustado trabajar y por qué?
Actualmente me gustaría trabajar con bandas como Blackberry Smoke, The Black Crowes, Band of Horses, Drive by Truckers, Queens of the Stone Age, The Cult, Lucinda Williams, etc… y me hubiera encantado trabajar, como no, con Creedence Clearwater Revival, Janis Joplin, Led Zeppelin… porque soy un gran fan de ellos y dan mucho juego a la hora de hacer una cartelería.

LEVIATHAN
www.leviathan13.com
¿Cómo y por qué te convertiste en un diseñador gráfico / ilustrador?
Fué sin lugar a dudas una «deformación profesional», mi madre pintora de acuarelas, y mi padre pintor al pastel y acrílicos, además de publicista, con ese caldo de cultivo lo raro hubiera sido dedicarme a otra cosa. De niño solía dibujar al lado de mi padres mientras pintaban, viajaba con ellos en sus exposiciones y algo me sedujo en Francia en una exposición de mi padre, tendría cerca de siete años. Quise vivir trabajando en lo que me gustaba y disfrutar de ello.
¿Siempre quisiste diseñar carteles concierto como parte de tu trabajo o fue una revelación tardía?
Mis primeros trabajos para Posters de conciertos fueron hace unos catorce años, no fue tardía pero hubiera estado bien que en aquella época hubiera habido una cultura del póster art mas tangible. La gente flipaba con esos Posters simplemente porque eran algo nuevo, cuando en otros países llevaban treinta anos haciéndolo porque funcionan de una forma muy especial, tienes arte pero también tienes a tu banda preferida, la fecha del bolo y posiblemente un recuerdo e infinidad de cosas.
¿Cuáles son tus influencias artísticas?
Esta es una pregunta tan amplia que nunca sé como contestarla. Supongo que como cualquier creativo tengo un ojo carnívoro de lo estetico, ideas y mente despejadas, me sugieren mucho la literatura, la poesía, el cine, la Música, mucha Música por favor… De ahí viene casi todo lo que me mueve. Vivir con banda sonora constantemente.
¿Cómo decides qué encargos aceptas?
Bueno, como creativo no me cierro a casi ningún proyecto, la obra de Leviathan la firmo con este nombre y eso es casi todo lo que publico en libros de diseño e ilustración pero también expreso y me apoyo en otras creaciones bajo el nombre de mi studio de publicidad »Boom Media». Espero no darle núnca la espalda a nada, me atraen los retos… Hago también corporativo, marcas, carátulas, dibujos para la industría del cine, identidades gráficas para empresas de helados, dibujos para la industria del cine Porno, interiorísmo y decoración, dirección de arte, doy clases en escuelas de publicidad, pero todo esto no se refleja en la obra de Leviathan. Esto es lo que me enciende, como artista nunca digo que no al experimento. Vivir no es algo necesario, lo que es algo necesario es crear. Risas
¿Cómo describirías la relación, tanto artística como comercial, con las bandas, los sellos o los promotores con que trabajas?
Que buena pregunta! Supongo que el ser un poco melomano hace que la comunicación con los músicos sea mas abierta y fluida, tengo un gran apego por la Musica y soy accesible y abierto, me interesan todas la músicas, me gusta hablar de esto con todos ellos, me siento agusto con mis clientes, muchos de mis mejores amigos fueron clientes. risas.
Ahora que la experiencia en vivo parece ser la única parte del proceso musical que no puede descargase, ¿has experimentado un aumento del presupuesto o interés en el diseño de carteles de conciertos por parte de los promotores y/o las bandas?
Hay algo muy curioso en todo eso, hace unos años nadie quería gastarse un pavo en pagar a un artista, y menos teniendo un vecino que dominaba tipografías como la Arial, Cómic sans y photochof. Cuando la cosa parecía salir un poco del desastre y empezábamos a disfrutar de un cierto respeto, caemos de lleno en una crisis, tanto los promotores como muchas bandas han vuelto a la edad de piedra. Algo como «el libro blanco del ilustrador» que se ocupaba de considerar los precios de una manera justa y equitativa para todos, es ahora algo desconocido entre las nuevas generaciones de hambrientos pseudodiseñadores gafapastas que viven realmente de otra moderna actividad laboral, pero como hobby dedican sus ratos libres a diseñar gratis para poder ligar en la disco de moda y blogear mas tarde. (Risas) Es una pena que se desacredite el arte de esta manera, ¡¡eso solo pasa en España!! me pregunto; si entre nosotros no nos apoyamos y respetamos, ¿quien lo hará?
¿Hay alguna banda específica con la que hayas creado un vínculo especial o una conexión creativa relevante?
Me gusta mucho mi trabajo y disfruto con los encargos de las bandas, incluso como dije antes conservo grandes amistades con muchos de los artistas. Stray Cats, Buddy Guy, Reverend Horton Heat, S.C.O.T.S, Zen Guerrilla, Raimundo Amador, Rezillos, El Vez, Atom Rhumba, Electric Frankenstein, Groovie Ghoulies, Little Richard… Joder, ¡guardo grandes recuerdos! Pero si tengo que hablar de algo bonito y especial fue cuando Willy Deville llamo a mi casa y cogió el teléfono mi chica, una llamada en medio de la noche para felicitarme por un poster que habia hecho para su proximo concierto, mantuvimos el contacto, luego él se marcho, pero de alguna manera su amistad y apoyo influyo positivamente en mi obra.
¿Cuál es tu proceso creativo?, ¿cómo trabajas la idea que quieres expresar y cuáles son los elementos o las herramientas de diseño con las que trabajas?
Me gusta el factor sorpresa, genero ideas a partir de la primera charla con el cliente, retengo y apunto todo lo que se me ocurre en ese momento tan especial y espontáneo, esto suele albergar muchas posibilidades de éxito, lo consulto con mi almohada y mas tarde preparo bocetos a lápiz, se matizan algunos puntos con el cliente y entinto en el ordenador. Este proceso no es siempre así, tampoco el orden, a veces tengo una charla con la almohada y entonces un cliente hace un boceto… Risas
Y, por último, ¿con qué bandas actuales te gustaría hada trabajar y qué artistas clásicos te hubiera gustado trabajar y por qué?
Porque me haces esto? Me pones en un aprieto, con tantas y tantas que no te queda papel en la hoja…
Texto: Roger Estrada
Publicado en Ruta 66 (enero 2011). Entrevistas con Patent Pending y diseñadores españoles inéditas… hasta ahora. 😉